El sistema educativo peruano es, como sabemos, históricamente centralista, así como lo es el Estado y el país en su conjunto. En este contexto, los centros y programas educativos de todos los niveles y modalidades cuentan con escasa autonomía en el desarrollo de sus funciones cotidianas. Es por ello que en el centro educativo, la instancia de ejecución del sistema educativo, la toma de decisiones es un ejercicio poco habitual. En este marco general, el director del centro educativo, que es el representante de la institución, se ha constituido, generalmente, en un mero ejecutor de las decisiones tomadas en los otros niveles del sistema educativo, en un tramitador de documentos hacia los órganos intermedios del sistema. Los maestros por su parte, se sienten obligados a aplicar de manera mecánica las estructuras curriculares emanadas del ministerio de educación.
Las Instituciones Educativas, en la generalidad de los casos, tienen escasa o nula posibilidad de asumir retos y compromisos con las necesidades de aprendizaje que tienen los estudiantes. En un terreno donde todo es rutina es poco probable que la innovación educativa se pueda expresar.
Al iniciarse el año 1996 se dieron normas específicas para fortalecer el desarrollo de los centros educativos públicos, y otorgar a los directores del mismo relativo poder de decisión en lo pedagógico, lo administrativo y lo económico.
Hay que tener en cuenta que aunque es real la autonomía otorgada, ésta es aún relativa. El centro educativo cuenta en la actualidad con instrumentos de gestión que, de ser empleados eficientemente, pueden coadyuvar a la construcción de un perfil pedagógico e institucional que proporcione identidad propia a la Institución educativa. En este sentido, la Propuesta del Proyecto Educativo Institucional para la Institución Educativa Público “Andrés de Los Reyes” es de vital importancia en tanto que marca el rumbo en el desarrollo de la Institución educativa en todos sus aspectos.
Al ponerse en vigencia la autonomía existe la posibilidad de iniciarse en un manejo curricular más autónomo. En lo administrativo se da la potestad al director de elegir el personal, tanto docente como administrativo adecuado para la construcción del PROYECTO EDUCATIVO INSTITUCIONAL.
Debo dejar establecido que existen diversos criterios, procedimientos y técnicas para elaborar el PEI, por que el presente trabajo sólo constituye uno de las formas del Proyecto Educativo Institucional. Pero lo más importante es que en su realización deben estar involucrados todos los agentes educativos, quienes deben desprenderse de egoísmos y participar democráticamente, para sacar adelante nuestra Institución Educativa Pública “Andrés de los Reyes”.
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